«Con la crisis económica actual, los periódicos están viviendo días turbulentos, disminución de contenidos, escases de publicidad, ingresos bajos, diferencias con el producto final y, tal vez, la pérdida de la democracia de un periódico y, por supuesto, la supervivencia del periódico respecto al cambio generacional y digital: el desarrollo de la Internet».
Globalización, el cambio de paradigmas
Al igual que el resto del mundo, nuestro país ha experimentado cambios sociales y culturales derivados de la globalización, todos lo cuales han impactado fuertemente en las nuevas generaciones. Los nuevos modelos de los estilos de vestir, comer y en especial de divertirse, utilizando las tecnologías de información a distancia en tiempo real con soporte informático, son aspectos propios del mundo actual.
El proceso de globalización se ha instaurado a escala mundial y nuestro país no es la excepción. Con la disolución del bloque socialista y posterior caída del muro de Berlín, y el nacimiento de Internet (a principios de los años 80), se funda el inicio de la globalización,. La nueva era tecnológica estaba recién comenzando y la Internet se apoderaba lentamente de hogares de miles de chilenos. La prensa de la época señalaba : “Hábitos que se expanden, modas que se reproducen velozmente en distintas partes del mundo, nuevos conocimientos a los que se puede acceder casi sin desfase temporal, gobiernos que caen, imperios que tambalean o desaparecen, economías que zozobran. Todo ello ocurre rápidamente, agitado por el viento de las tecnologías de telecomunicación que se habían ido sumando: el cable, el teléfono, la radio y la televisión…después, los satélites y los sistemas cibernéticos; nuevas formas, que además, se retroalimentan. Los que habían previsto un mundo más interdependiente tuvieron razón”[1].
Con el auge tecnológico mundial, los chilenos poco a poco (nos íbamos) incorporando a los procesos de mundialización, aunque al principio pocos “nos atrevimos a subirnos” a este nuevo carro informático desconocido, pero con el tiempo el crecimiento fue mayor. En el año 2004, en nuestro país, la cifra de 10,2%[2] corresponde a los usuarios conectados a la red.
Con la llegada de la globalización, el Tercer Milenio se presenta en plena revolución de nuestra cultura con las tecnologías de conocimiento. La sociedad global ya es un hecho. Internet y sus servicios facilitan en mayor medida la comunicación de los ciudadanos y al acceso al conocimiento. Las circunstancias sociales, geográficas y económicas, ya no son un obstáculo para los recursos tecnológicos de comunicación. Es así, que la comunicación es accesible para todos, tal cual como se expresa en el Art. 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos:
“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”[3].
Tras la irrupción de la Internet, el verdadero enemigo de los periódicos es la tecnología. El tiempo de la disposición de la gente es menor, puesto que la tecnología facilita leer, comprender y analizar la información en forma mucho más rápida y más económica. Para los medios, la tecnología es la amenaza o, tal vez, la oportunidad de establecer patrones nuevos de información. Internet, exige a los medios de comunicación información inmediata y precisa. Es también la creación de un periodismo distinto, un valor dentro de la información, con más calidad y de participación hacia sus lectores. Es ese el valor agregado, no otro.
La tendencia parece estar cambiando. El rápido crecimiento de Internet, permite a muchos usuarios acceder a sitios online de los medios de comunicación y gratis. Basta con su sólo clic y el usuario encontrará todo lo que busque, en cualquier lugar, a cualquier hora y, sobretodo, gratis.
A pesar de toda la tecnología existente, Internet, representa una nueva forma de producir contenidos, de transmitir mensajes, en definitiva de hacer periodismo, ya que la red impone una formula distinta de redacción conforme al actual perfil que consienten los medios a la “súper carretera de la información”. A pesar de que los medios han incursionado en la red, ajustándose a los tiempos actuales, esta nueva era también ha acarreado que los contenidos en los medios de comunicación han transformado el contenido de la información, en búsquedas de poca indagación, menos rigor y liviandad de los contenidos periodísticos.
“Por último, el mundo de los medios es diverso. Es una realidad con varias capas. Al lado de los “medios-chatarra”, hay otros formidables: existen algunos prodigiosos programas de televisión, excelentes emisiones de radio y periódicos notables. Para quien desea una información honesta, de reflexión profunda y fundada en sólidos conocimientos, no faltan los medios”[4].
Atentados del 11 de septiembre: El mundo cambió, la prensa también.
Desde el punto de vista económico, la crisis comenzó con los atentados del 11 de septiembre (11-S). Ahora en el ámbito de los medios de comunicación. Suena raro o, tal vez, extraño, esta afirmación pero si miramos los atentados del 11 de septiembre y nos hacemos la siguiente pregunta: ¿qué buscaba la gente de Al Qaeeda con los medios de comunicación? La respuesta es: un efecto mediático como arma de lucha con sus divulgaciones.
En efecto, el grupo de Osama Bin Laden busca un resultado mediático tan potente que afectará al mundo y a los medios de comunicación a nivel mundial. Si comenzamos a recordar los atentados, lo primero que se viene a la cabeza es el hecho que el grupo golpeó los dos símbolos más importantes de la política norteamericana: las Torres Gemelas y el Pentágono.
El día que comenzaron los ataques, los principales medios de comunicación se vieron envueltos en una crisis de pánico e histeria mediática. Primero, los medios no podían filmar los cuerpos caídos en las Torres Gemelas, ni menos entregar imágenes al mundo de las personas afectadas entrando a las clínicas norteamericanas. Segundo, la actitud de la prensa norteamericana inquieta y forma parte de una crisis tanto institucional como mediática de los medios estadounidense, ya que se produjo una disyuntiva muy fuerte que dice relación con la falta de objetividad que tuvieron los medios al entregar la información, ya que no se separó los sentimientos, las sensaciones personales, desatándose un periodismo patriótico, que lejos de entregar la información real, desató una serie de comentarios cargados de emocionalidad, que esta lejos del profesionalismo periodístico.
Por último, “el mundo de los medios es diverso. Es una realidad con varias capas. Al lado de los ‘medios chatarra’, hay otros formidables: existen algunos prodigiosos programas de televisión, excelentes emisiones de radio y periódicos notables. A veces es difícil disponer el tiempo necesario para asimilar la oferta existente. A menudo se vilipendia a los medios para justificar el letargo en el que están sumergidas nuestras propias conciencias, y nuestra pasividad”[5].
Internet como nueva herramienta en la prensa
Con el nacimiento de Internet en la década de los noventa, y la transformación a la alfabetización digital, que ésta trajo aparejada, los periodistas han tenido que transformar sus prácticas informativas para estar a la par con las nuevas tecnologías de información y comunicación (TIC). Dentro de esta nueva metodología, podemos distinguir tres reflexiones. En primer término, la incursión al periodismo 1.0, donde el periodista está conociendo Internet, copia y pega la información a un formato digital. En segundo lugar, existe el periodismo 2.0, asociado al concepto de Tim O’Reill, un fuerte impulso al Software libre, y uno de los precursores de la Web 2.0, en donde el usuario comparte, distribuye, crea, administra tanto los blogs, como las redes sociales, las Wikis y las folcsonomías, que fomentan la colaboración y el intercambio ágil entre usuarios. Y por último, el periodismo 3.0, asociado a ordenar las ideas y similitudes a través de motores de búsqueda capaces de entrar en la era del conocimiento, por medio de búsquedas semánticas, término acuñado por Tim Berners-Lee, quien habló de una Web Semántica, donde la web, propiamente tal, tendrá un significado más semántico a la actual Web 2.0.
Cuando Juan Luís Cebrián, un consejero del delegado de Prisa del periódico “El País” de España, entrevistó al presidente de Microsoft, Steve Ballmer, cuando estuvo de visita en España para firmar un acuerdo con el Ministerio del Interior, analizó el sector tecnológico y la actual crisis de los medios de comunicación, en especial de los medios impresos y señaló: “Los periódicos desaparecerán en 20 años, toda la lectura se hará en formato electrónico»[6].
Ya en el año 1992, el periódico “The Chicago Tribune”, colocó su información en conexión directa con la World Wide Web (www). Al año después ocurrió lo mismo con el periódico “San Juan Mercury Center”, aunque con aplicaciones más interactivas para el usuario, como por ejemplo: la incorporación de anuncios clasificados o el correo electrónico de sus periodistas.
Sin duda, Internet incitó a la creación de nuevas formas en la producción de las noticias, de transmitir mensajes, y también provocó cambios en los lectores, que pasaron a tener un rol más activo, pero lo más destacado es que Internet pasó a redefinir el periodismo actual, toda vez que los medios de comunicación están obligados a crear un periodismo que no solo toque temas, sino que deben tomar en cuenta como ese contenido se relaciona con el lector.
Por último, los medios de comunicación deberán buscar encontrar nuevas fórmulas para adaptar sus contenidos de papel al nuevo soporte electrónico.
Por otra parte hay que agregar que en la actualidad, estamos viviendo una nueva crisis económica, que lógicamente afecta a la industria comunicacional, los periódicos están viviendo días turbulentos, disminución de contenidos, escases de publicidad, ingresos bajos, diferencias con el producto final. De este modo los medios de comunicación hoy día, están rodeados de fenómenos unos más actuales que otros que traen aparejada la inevitable consecuencia de generar cambios en la forma de hacer periodismo.
Barack Obama, el impulsor de la Web 2.0
El actual Presidente de los Estados Unidos, el demócrata, Barack Obama, fanático de su teléfono móvil Blackberry y de las nuevas tecnologías de la Web 2.0, es el primer presidente que utiliza los medios 2.0 para difundir sus mensajes de campaña.
Videos dirigidos por Youtube, acercamiento de los medios digitales y redes sociales promocionando su letal frase: “Yes, we can” (sí, nosotros podemos), con mensajes SMS vía teléfonos celulares, marcó una nueva forma de hacer política y transmitir mensajes a los ciudadanos con las nuevas tecnologías existentes.
Las diferencias en la llegadas que los candidatos tuvieron en la población norteamericana, Barack Obama y John McCain fueros bastantes notorias. Primero, el candidato republicano, utilizó la tecnología, pero con un lenguaje más antiguo, menos impactante que su contrincante demócrata, quien utilizó toda su artillería en los medios digitales y redes sociales, Twitter, Facebook, Youtube, y el uso masivo de mensajes de textos SMS (por sus siglas en inglés Short Message Service) marcaron la batalla digital por obtener el trono más preciado: el sillón de la Casa Blanca y de la nación entera.
Si bien, el tema de fondo de la Web 2.0, es compartir, informar, interactuar, participar, en la política está entrando sigilosamente el concepto. Esto significa, que el usuario no es un actor pasivo de recibir mensajes, sino que también tiene la posibilidad de involucrarse, de participar, e incluso, interactuar y mejorar su participación.
Por ahora, Barack Obama, utilizó bien los recursos y las plataformas digitales, con un simple mensaje SMS Obama Móvil, donde los latinos podían votar con un mensaje de texto al número 62262; como por ejemplo, Twitter, la plataforma de microblogging, en donde utiliza la simple redacción de un mensaje de 140 caracteres vía SMS, donde atrajo a miles de personas a un lema: “les pido creer. No solamente en mi capacidad de cambiar la manera de hacer política en Washington, sino en la capacidad de hacerlo conmigo”[7]. Con esa frase, el candidato demócrata divulgó su campaña y su acercamiento a la gente a través de la Web 2.0., que, por cierto, también fortaleció su triunfo a la presidencia del país más influyente en el mundo.
La utilización de plataformas y soportes digitales en la política en los Estados Unidos hace que Barack Obma sea el político 2.0 más exitoso de la historia de la web, un geek posicionado socialmente en la conciencia de varios usuarios identificados con la voz de Barack Obama en su teléfono móvil: «Yes, we can”, pero ¿estamos tan preparados en la política con plataformas de la Web 2.0? Por ahora, Obama nos ha dado una lección.
Conclusiones
La era digital nos muestra que las Tecnologías de Información y Comunicación seguirán en constante evolución, con el fuerte impacto que ellas conllevan en el mundo industrial, comercial, político y por supuesto en las comunicaciones, a nivel personal, organizacional y de comunicaciones masivas.
Lo anterior, significa que irremediablemente, en el mediano y largo plazo los medios periodísticos tradicionales tendrán cada vez menos influencia y por ende menos tiraje, siendo reemplazados por los medios digitales y las nuevas tecnologías que emerjan.
Por otra parte, las TICs cada día tomarán más fuerza en el mundo de la educación, por lo que los futuros ciudadanos lectores estarán orientados al uso de medios digitales, como medios connaturales con ellos.
Será por lo tanto imprescindible formar periodistas con un nuevo perfil de competencias, desarrollar nuevos criterios de marketing y comercialización a través de Internet, y finalmente, fortalecer la alfabetización de todos los ciudadanos, de distintas edades, género, clases sociales y económicas, para permitir su acceso a las comunicaciones, en un rol mucho más activo que el esquema tradicional dado hasta ahora.
[1] Edición aniversario “100 años” (15 de noviembre de 1905- 15 noviembre de 2002) “la Globalización atrapa a los chilenos” Las Últimas Noticias, 15-11-2002, pág.84.
[2] Censo del Instituto Nacional de Estadísticas (2002).
[3] Art. 19 Declaración Universal de Derechos Humanos del 10 de diciembre de 1948.
[4] Ramonet, Ignacio “Nuevas tecnologías y concentración de medios: La prensa ¿refleja la realidad”, Pág. 27.
[5] Ramonet, Ignacio “Nuevas tecnologías y concentración de medios: La prensa ¿refleja la realidad”, Pág. 27.
[6] Cebrián, José Luís, diario “El País” de España. http://www.elpais.com/comunes/2006/cebrian-ballmer/video06.html
[7] Obama, Barack “Barack Obama en Español” http://my.barackobama.com/page/content/espanol
Sady Maureria B 